Estudio Romanelli
Reforma integral en Vía Laietana: La visión de Daniele Romanelli en un piso histórico
En el corazón de Barcelona, cerca de la emblemática Vía Laietana, se encuentra un edificio de principios del siglo XX que ha sido testigo de innumerables transformaciones a lo largo de los años. Originalmente, cada planta albergaba un único piso de 500 m², pero con el paso del tiempo, estas amplias viviendas fueron subdivididas en unidades más pequeñas. En este contexto, Daniele Romanelli emprendió la ambiciosa tarea de reformar integralmente un piso de 160 m², anteriormente utilizado como oficina, para convertirlo en una vivienda moderna y funcional destinada al alquiler.
Desafíos iniciales y planificación del proyecto
El principal reto de este proyecto residía en diseñar una distribución que permitiera la integración de dos baños, una cocina y un cuarto de plancha alrededor de un patio interior, donde se ubicaban todos los desagües. Además, era esencial respetar la configuración de los pisos contiguos, que en reformas anteriores no habían considerado las posibles interferencias con esta unidad. Para abordar estos desafíos, se decidió demoler todos los techos del piso, con el objetivo de sanear las instalaciones acumuladas durante más de un siglo y reparar las grietas presentes en techos y paredes.
Diseño interior y elección de materiales
Tras la demolición, se instalaron falsos techos de Pladur en toda la vivienda, excepto en el salón, donde se restauró y dejó a la vista un impresionante techo original con bovedillas. Sobre los falsos techos, se distribuyeron nuevas instalaciones y un sistema de aire acondicionado por conductos, dividido en dos zonas para climatizar la vivienda de manera eficiente. La cocina, diseñada a medida, presenta muebles blancos con tiradores tipo gola y una encimera de Neolith del mismo color, creando líneas limpias y contemporáneas. Para mantener la estética minimalista, se integraron electrodomésticos como la nevera, el lavavajillas y la campana extractora. Además, se incorporó una isla con zona de desayuno, fomentando la interacción en el espacio.
Distribución y acabados
La vivienda cuenta con cuatro habitaciones, un salón espacioso y luminoso con tres ventanales que ofrecen vistas espectaculares de la catedral de Barcelona, una cocina parcialmente abierta al salón, dos baños, un cuarto de plancha, trastero, recibidor y un pasillo en forma de L que conecta todas las estancias. Se optó por un suelo de parquet macizo de la marca Junckers en toda la vivienda, aportando calidez y continuidad. En los baños, se eligieron baldosas cuadradas de color gris musgo colocadas a media altura, con encimeras de mármol Venato, lavabos sobre encimera y grifería empotrada en la pared, logrando un equilibrio entre funcionalidad y estética.
La reforma, que tuvo una duración aproximada de 15 semanas desde el inicio de las demoliciones hasta la entrega de llaves, cumplió plenamente con los tiempos y presupuestos pactados, superando las expectativas del cliente. Este proyecto es un testimonio del compromiso de Daniele Romanelli con la excelencia en el diseño y la ejecución, respetando la historia del edificio mientras se adapta a las necesidades contemporáneas de los futuros inquilinos.
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